LA SÁTIRA BARROCA

LA PERSECUCIÓN PEPERA
[Romance]

Esto empieza a ser ya un abuso
y yo no dígolo en broma,
que se está acosando al Pepe
más que el cristianismo en Roma.

Al pobre Camps en Valencia
solo por ir bien vestido,
cosa a tener muy en cuenta
en todo hombre bien nacido.

Y pagábalo al contado
por lo que no ha la factura,
no con tarjeta ni a plazos
que él es de muy buena hechura.

¿Acaso vuesas mercedes
cuándo compran, almacenan
facturas de lo comprado?
¿Por qué a Camps por ello penan?

Cierto que Camps no pagaba
esos trajes que lucía
mas ¿quién no acetó albricias*
por favores algún día?

También que eran algo caros
mas no sería prudente
donalle saldos baratos
a un señor que es Presidente.

Luego viene lo del Jaguar;
pues ahí no ha pasado nada,
se ha comprado uno nuevo
y el viejo diólo de entrada.

Mato no había nada en ver**
que era cosa del marido
y ni lo habían hablado
mas ambos son del partido.

Y aquí radica la cutión
pues toda la trama apunta
al tal Francisco Correa
cual bribón que a todos unta.

Esto ya es una otra cosa,
se habla de mucho dinero
que por azar siempre acaba
en manos del tesorero.

Llega el tema de aforados,
do siendo unos caballeros
todos ellos muy ilustres
gozan de sus propios Fueros.

Y pasan a la ofensiva
al acusador acusando
del acosallos sin piedad
de su poder abusando.

Viene aquí bien un proverbio
que por ser viejo es muy sabio:
“todo aquel que del juez huye
en contra de sí arguye”.


* Albricias: regalos.
** Léase: Ana Mato no tenía nada que ver.