El Tribunal Constitucional ha quedado finalmente formado para poder
resolver varias tareas pendientes, entre ellas el recurso de
inconstitucionalidad de la ley del matrimonio entre personas del mismo sexo.
Otra de los trabajos pendientes es la nueva ley restrictiva les aborto
preparada por el ministro Ruiz Gallardón.
Como ponente
de esta ley figura Andrés Ollero Tassara,
ex-portavoz del PP en la Comisión de Justicia e Interior del Congreso, catedrático de la Universidad Rey Juan
Carlos, y supernumerario del Opus Dei
con alto cargo en su jefatura.
Como se puede suponer por los antecedentes citados, tan probo
personaje es antiabortista extremista y homófobo declarado. Ferviente
seguidor de la Santa Intolerancia de
Monseñor Escrivá de Balaguer tachó en su
día de criminales de guerra a las
mujeres que por uno u otro motivo abortaban. Totalmente contrario a la despenalización
del aborto, ya en 1983 decía “Despenalizar
el aborto no es simplemente tolerarlo, sino que equivale a normalizarlo, ya que
algo que no es rechazable jurídicamente se convierte en un derecho”. En su producción escrita, figura “Bioderecho”, una pretenciosa obra que
pretende ofrecer a las creencias, dogmas y misterios una apariencia
metodológica y científica de la que lógicamente carecen.
Pues bien, tan iluminado personaje será el encargado de la
ponencia para volver el aborto a los enunciados de los años 80 del siglo pasado,
si bien por su parte, los devolvería a la Edad Media. Y el
problema es que de acuerdo a las leyes españolas, ni la ideología, ni la
religión, ni su postura en contra del aborto, son motivo para retirarlo de la
ponencia del mismo, ni siquiera para una abstención ética, que sería lo más
lógico, y que es lo que han pedido algunos partidos políticos.
Sin embargo, desde Estrasburgo, la doctrina del Tribunal
Europeo de Derechos Humanos (TEDH), recoge en su jurisprudencia que la significación ideológica del llamado a
juzgar puede comprometer su apariencia de imparcialidad y exige a los
Estados firmantes del Convenio Europeo de los Derechos Humanos, que comprueben la debida neutralidad ideológica
de sus jueces, o se estaría violando el derecho a un tribunal
independiente e imparcial.
Claro que también con Garzón se exigía lo mismo y acabó como
acabó, porque aquí la justicia es independiente cuando le interesa y
de quien quiere.
El Constitucional ya está
nuevamente
conformado,
y algún trabajo
pendiente
sentado está
preparado.
De los trabajos
pendientes
hay uno asaz
delicado,
que es devolver
el aborto
a hechos del
siglo pasado.
Y han puesto en
ello ponente
a un juez que
es antiabortista,
intolerante y
creyente,
y del Opus Dei
integrista.
También
homófobo extremista,
el
matrimonio es sagrado
y entre
personas de un sexo
no ha de ser
normalizado.
Que si algo
despenalizan
aún es más que
tolerallo,
pues que así lo
normalizan
y en derecho
hay que tornallo.
Ese deseo contumaz de la Iglesia por mandar
y regir la forma de vivir de las personas
Personaje pretencioso,
ha querido lo
imposible:
dar a las
creencias y dogmas
un sentido
comprensible.
Comprensible y
científico,
es decir, algo
razonado,
pero quedóse en
beatífico
que el creer no
es algo fundado.
Si nadie
logra enmendallo
será este santo
varón
el que termine
metiendo
al aborto el
cucharón.
Si no acudimos
a Europa,
al Tribunal de
Derechos,
seguro que al
XIX
nos devuelven
bien derechos.
Y aún así,
mucho cuidado
y estemos a
partir nueces,
que sabemos de
qué cojean
nuestro muy querido jueces.
Sencillamente diré que estoy de acuerdo con el chiste, aunque hay algo que como mujer (ni aunque hubiera sido hombre) entendí....... si no quieres problemas no te metas donde no conviene. Claro que es una injusticia el aborto, y el dolor injusto producido por una enfermedad grave, y....que te pille un tsunami en la playa, y..... en fin que la vida es una pura injusticia (los hay que fuman y llegarán a los 100: Carrillo p.e.) y uno tiene que saber donde se encuentra desde bien pronto y actuar en consecuencia si no quiere perecer en el caos aleatorio de la existencia.
ResponderEliminarEscrito lo cual paso a desearte que te vayas reponiendo a buen ritmo. Bsss.
El problema, emejota, es que se intente legislar no según los principios de la Ley: el uso de la Razón y la igualdad, sino anteponiendo dogmas de creencias que no tienen nada que ver con la legislación, ya que vivimos en una sociedad laica. Esta continua injerencia de la Iglesia en la vida social es lo que no se puede permitir. Una cosa es que lo hagan con sus creyentes y seguidores, y otra muy diferentes que intenten legislar para todo el país, incluyendo los no creyentes, y siendo además anticonstitucional.
EliminarMi reposición es lenta dado el tremendo calor que está haciendo estos días.
Gracias, y un abrazo.
En mi escala de valores siempre ha primado la libertad, por encima de todo. Desde muy pequeña tenía verdaderos problemas, con mi madre sobre todo, por no entender las imposiciones y el porque sí sin argumentos
ResponderEliminarHe tenido cuatro hijos, viven dos chicas y voluntariamente he abortado dos veces
Nunca me he arrepentido de ello. Tenemos derecho a decidir
Besos queridísimo D. Carlos. Sigue cuidándote.
De eso se trata. Nadie tiene derecho a coartar tu libertad con argumentos peregrinos y acientíficos, más basados en creencias que en pruebas científicas. Como he dicho en la respuesta anterior, es una injerencia de la Iglesia inadmisible, el que intente legislar la vida de todo un Pueblo, creyentes y no creyentes, aparte de ser anticonstitucional, porque el Estado, y por tanto el Legislativo y todos sus órganos deben de ser laicos y no contaminados por sus creencias.
EliminarUn abrazo, María.
Hay que ver el estilazo que tienen en el Opus para decorar salones. ¿Has reparado, Carlos, en la armonía que emanan de la fotografía? Yo creo, como decía el Dr. Beltrán, que estamos en buenas manos. Un tanto interesadas, lascivas, asesinas, amantes de la pira... pero, al fin y al cabo, buenas manos.
ResponderEliminarTened en cuenta que son muy refinados (muchos de los que conozco, en exceso) en sus gustos, tienen dinero, y se pueden permitir estos y otros lujos. Un amigo que tengo y es vecino mío, tiene un apartamento, que esto que ves en la fotografía no es nada comparado con el suyo. Es uno de los grandes jefazos del Opus, pero he de decir sobre él, que como persona, es una gran persona y si puede ayudar a alguien, le ayuda. Ahora, sobre estas cuestiones...mejor no hablar.
EliminarUn abrazo.
Con la iglesia hemos topao querido y admirado amigo y poeta. En verdad que son hipócritas al máximo . ¡¡¡¡ Como se atreven a imponer su opinión ¡¡¡ Cuando ellos son los primeros en cometer mil atrocidades. Pederastas y muchas más cosas que ellos se guardan bajo manga porque no les conviene para nada que salgan a la luz sus infamias Pero de lo que no se dan cuenta que en este siglo todo sale a la luz pues ya no vivimos en aquellos tiempos que nos ponían una venda en los ojos . Cada individuo es libre y tiene derecho a hacer con su cuerpo y su vida lo que a el le parezca más razonable siempre y cuando no dañe los sentimientos y la dignidad de los demás.Ufff y mejor ya no comento más, porque no quiero salirme de contexto .
ResponderEliminarMuchos besinos de esta amiga admiradora que como siempre me siento orgullosa de ser tu amiga y seguidora por la educación y el buen hacer que tienes para exponer las cosas.
Muchas gracias OZNA por tu comentario. Como dices, la hipocresía es para ellos una virtud que saben ejercer muy bien, y les gusta que los demás sigamos sus normas por mucho que no seamos seguidores de su secta, pero lo llevan en la sangre.
EliminarSaludos y un fuerte abrazo.
Tristemente es así, la justicia retrocede a pasos de gigante al igual que estamos retrocediendo en todos los derechos con este gobierno.
ResponderEliminarUn saludo
Yo diría, que la justicia ya no existe y que los derechos han desaparecido, mientras que se legisla para mantener la desigualdad ante la ley y defender los privilegios de los poderosos y de instituciones retrógradas.
EliminarTal forma de gobernar desautoriza a quien gobierna y legitima al Pueblo para ejercer la desobediencia civil y la insumisión económica y otros tipos de acciones para recuperar su soberanía.
Un abrazo.
No hay derecho, toda esa gentuza no tiene ni idea de lo que es la caridad, no conocen la dignidad y son tan crueles que no saben lo que es la lastima.
ResponderEliminarSi los obispos se pudieran quedar preñados, el aborto seria un sacramento.
Ja, ja, ja... Lo has acertado. Tal vez por eso no quieren mujeres sacerdotisas. Sería uno más de los pecados que se pueden cometer en privado, mientras tu mano derecha no sabe lo que hace la izquierda. Alimentaría su hipocresía.
ResponderEliminarUn abrazo.
Son unos hipócritas, los que más critican el aborto son los primeros que cogerían una pistola para cargarse a todo el que no piensa como ellos, solo hay que preguntárselo. Alguien que dice que defiende la vida no puede ser intolerante...
ResponderEliminarEn fin. Una vez más toca echarse las manos a la cabeza y reír por no llorar.