Si seremos especiales
en esto de los juzgados
que han los papeles mudados,
y agora son los fiscales
los que hacen de abogados
y los jueces de acusados.
Esto, que había pasado,
está de nuevo pasando
y andan jueces recusando
agora en más de un juzgado,
no siendo nada de extraño
que al final haya un apaño.
Es un los juicios de Blesa
y en el del yerno del rey,
donde abusando de ley
quieren que resulta ilesa
la imagen de la codicia
rematando la justicia.
Mas nada pasa por ello,
que al ser de tal guisa, tantos,
bien pueden parecer santos
sin precisar de atropello,
que unos y otros, tal por cual,
viene en ser muy habitual.
Los ahorros
ya se los llevó el viento, ahora
toca pedir
dinero que no te concederán
Y es tal la depravación
destos juicios que yo canto,
que ya no hay juzgado santo
desde que la Inquisición,
bien fuera calvo o con pelo,
a ambos elevaba al cielo.
Y no hablemos de los bancos
y del tema preferentes,
rebuscando a inocentes
para usallos como blancos
y timalles el dinero,
que ése es el nombre sincero.
No digan que no sabían
que no sería devuelto,
porque ya habrían revuelto
entre las listas que habían
de probables inversores
con dinero y con valores.
Mas fueron a por pardillos
y a sus ahorros sacalles,
desde inicio a estafalles
pasándoles el cepillo,
y al ser humildes, pensando
que luego irían callando.
Mas salieron respondones
y nos hemos enterado
de la que habían montado
esta basca de pendones,
todos a la igual medida
de la gente corrompida.
De los que roban a pobres,
de los que son cual gusano,
si es caso, ponen el ano,
y les gusta cobrar sobres.
A todos bien conocemos,
pero no reconocemos.
(Continuará)
Hay gente
que sabe entrar en este juego
y después
estamos los pardillos
No todos los afectados por las preferentes eran pardillos, eso es una simplificación del problema. Era en su mayoría gente mayor, digna, honesta que nunca podrían llegar a pensar que el banco donde habían depositado sus ahorros durante toda su vida les iba a estafar. Por desgracia, estoy viviendo el asunto en primera persona.
ResponderEliminarMi estimado Dr. Krapp: el adjetivo - en este caso - de pardillo, que he aplicado a las personas que fueron engañadas con mala fe por parte de los bancos y cajas, quiere decir exactamente lo mismo a lo que te refieres, personas inocentes y honestas de las que se ha abusado por su buena fe.
ResponderEliminarPardillo, aparte de ser un pájaro común en Europa y otros continentes con diversas formas, es también una persona incauta, es decir, falto de malicia y fácil de engañar, más aún si se abusa de la confianza que tiene en la institución y el representante de la misma, que les está engañando.
Si lo vives en primera persona, te deseo, no que tengas suerte, sino que se aplique la justicia de verdad y hasta el último renglón de la misma.
Saludos.
Me gustaría ser optimista
ResponderEliminarPero un nuevo constitucional han nombrado
Y mucho me temo
Que otra vez nos la han colado
Las preferentes son un engaño
Pues, la princesa dicen que no sabe lo que ha firmado
Con master y carreras
Deben valorar mas a la del jubilado
Los fiscales han dicho
Que la firma ha acreditado
Que no han sido engañados
Y se han quedado tan anchos
Teniendo en cuenta que estamos
ResponderEliminarpor idiotas gobernados,
no es de extrañar, que juzgados
por memos también seamos,
y de puro no hacer nada
no hagan ni una coordinada.
Así que no es de extrañar
que no den ni pie con bola,
pues que estando a la bartola
volcados a arrebañar
lo que han podido agenciar,
ya no saben sentenciar.
Un abrazo.
usted siempre tan creativo, pero malos tiempos para la lírica, aunque para la lírica siempre han sido malos.
ResponderEliminarSaludos.
Llevas toda la razón, pero para los satíricos siempre son tiempos de más inspiración, pues los idiotas florecen por generación espontánea, o al menos pierden el sentido del ridículo y no temen hacerlo en público para regocijo de nosotros y de la audiencia en general. Si hasta al DIVINO, a ÉL, le ha dado por rebajarse y hablar con nosotros, los pobres humanos, para decirnos que su elegido no nos está llevando por la senda correcta que tan bien él le marcó. ¡Pobre de él! Arderá en el fuego eterno con todos los jueces, fiscales díscolos, y abogados que atacan su buen nombre y el de "su" partido. ¡Anatema es lanzado contra ellos!
ResponderEliminarUn abrazo.
Truculenta historia la nuestra, ahora comprendo aspectos de la vieja historia de España, aspectos que no son fáciles de entender, pero con todo lo que está pasando actualmente, uno se da cuenta que nuestra historia, no para de repetirse, más de lo mismo.
ResponderEliminar¡Viva mi dueño!.
Saludos y a pasar un buen día.
Y tan truculenta, que hubo una vez un rey que hizo vestir a toda la corte (y al resto del reino no, porque ni iban vestidos, sino que llevaban harapos), de negro, arruinó uno de sus reinos llamado Castilla (la actual España menos la Confederación catalono-aragonesa) en guerras religiosas que al pueblo le importaban un comino, y es tenido en la historia como el más grande monarca de todos los tiempos de los reinos de las Españas. Claro que esa misma historia tiene a Franco como un hombre algo autoritario, pero que trajo prosperidad y modernizó el país. Y enseñando esto a nuestro criaturos y criaturas, ¡qué queremos!
ResponderEliminarUn abrazo.
El problema es la sensación de impunidad para políticos y banqueros.
ResponderEliminar¿No da a veces la impresión de que hagan lo que hagan no les va a pasar nada de nada? En vista de todos está que en cuanto un juez trata de meter mano en un caso de corrupción ese juez es rápidamente anulado/apartado por las propias instituciones que deberían velar por la "justicia".
Parece de ciencia ficción.
Precisamente es esa sensación de impunidad que tiene la casta - y que no es sólo una sensación, sino una realidad - lo que hace que las corruptelas sean tan a la vista y de forma tan desvergonzada, que ya empiezan a causar sonrojo, y en Europa preocupación. Porque no es que seamos el único país en que hay corrupción, pero en el que ni se castiga ni se reconoce de forma tan descarada, tampoco hay otro. Tal vez Italia se nos asemeje algo, pero ni la Mafia tiene el poder que tiene aquí la casta. Ten en cuenta que hay más de 1.500 casos de corrupción abiertos, ninguno cerrado ni ningún acusado en la cárcel, salvo Díaz Ferrán y Belsa de forma provisional. Y esos 1.500 son una mínima parte de la realidad. O sea, que haz cuentas, y...
ResponderEliminarUn abrazo.