EUROPA NOBEL DE LA PAZ ¿O DE LA PAZIENCIA?

Hace ya años, que la concesión de los premios Nobel de la Paz, salvo raras excepciones, han caído en un desprestigio social cada vez mayor, debido al alto grado de politización en la asignación de la persona o en el ente que recibe el premio.

Desde que en 1973 fuese galardonado con el Premio Nobel de la Paz el asesino Henry Kissinger, la reputación de imparcialidad y justicia en la concesión de tales premios empezó a caer en sospecha. Sospecha que se vería confirmada unos años más tarde, en 1978 con la concesión del premio a Menachem Begin, junto con Al-Sadat, por los acuerdos de paz de Camp David, que después Israel se encargaría – como de costumbre – de no cumplir.

El hecho de que se lo concedan a Europa en estos momentos, cuando la UE produce y exporta armamento a mansalva, ha estado promoviendo e interviniendo en guerras como las de Afganistán e Irak, la de Libia y actualmente la de Siria, ha sido incapaz de imponer la paz dentro de su propio territorio, en los Balcanes, en una guerra genocida, teniendo que hacerlo la OTAN para vergüenza y humillación de Europa, ha promovido golpes de Estado, como ahora el de Costa de Marfil, y dentro de sus fronteras hay centros de internamiento de extranjeros y un ascenso del racismo, aparte de una represión de los gobiernos europeos contra sus propias ciudadanías, a las que se está despojando de todo tipo de derechos y se desprecia constantemente, es cuando menos un insulto a la inteligencia y un atentado a la ética política y a la moral.

No se puede conceder el Premio Nobel de la Paz

a una Comunidad en la que no existe democracia

y se han recortado los derechos del Pueblo 

Conceder el Nobel de la Paz a la UE en estas condiciones es lo mismo que nombrar Padre de la Patria en Israel a Adolf Hitler, lo cual no deja de ser una verdad, pues gracias a él y sus matanzas de judíos, la recién creada ONU, permitió que se asentasen en tierras colonizadas bajo jurisdicción de la Corona Británica, y creasen un estado a costa de los palestinos, a los que no quedó otra salida que emigrar, más cuando Gran Bretaña se marchó de allí dejando el avispero ya montado. Contradicciones de la vida.

Ahora bien, puede ser que se lo hayan concedido, no por lo que ha hecho, sino por lo que todos desean que haga; más o menos como se lo concedieron en el 2009 a Obama. Por unas promesas que hizo y que levantaron grandes esperanzas, pero que no ha cumplido.

Puede entonces ocurrir que ese premio, que reconoce el avance de la paz y la reconciliación, la democracia, y los derechos humanos en Europa, sea un intento de animarnos a luchar contra la agresión del neoliberalismo y su codicia sin límite que nos ha sumido en una dictadura, y recuperar los derechos perdidos, tanto sociales como laborales, caminando de nuevo, pero todos juntos hacia una democracia verdadera.

Puede ser que esté respaldando nuestra lucha contra los políticos corruptos y las políticas de austeridad que nos han arrastrado a la miseria, que nos aliente a entendernos mejor entre el norte y el sur y poner un poco por parte de ambos para ver que tenemos más intereses en común que diferencias, que nos empuje a todos a seguir con una unión de verdad, no sólo monetaria, sino social y política, unificando leyes y derribando barreras y perjuicios, nacionalismos y banderas, avanzando hacia una Comunidad Europea verdadera.

No es que sea verdad lo que estoy diciendo, es un sarcasmo, pero es como nos lo vamos a tomar, porque al fin y al cabo Europa somos el Pueblo, no sus bancos ni sus élites que nos dirigen con sus políticos corruptos, sino todos nosotros, que reclamamos nuestra soberanía robada. Así que, ¡recojamos nuestro Premio Nobel!

¡Fuera patrias! Ahora europeos, y siempre,

ciudadanos del mundo

El Premio Nobel han dado

a la asociación de Europa,

tomaremos una copa

en honor del acertado

premio otorgado a banqueros

delincuentes y usureros.

El Premio Nobel de la Paz

años ha, que es manejado

y que existe interés creado

en su adjudicación falaz,

en su concesión injusta

  y en su elección, ya vetusta.

No puede ser designado

para el Nobel asesinos

ni los que son tan mezquinos

que no acatan un Tratado

que es de Paz e Internacional,

pues para él no es funcional.

Que se lo den ahora a Europa,

donde ya no hay democracia,

cada día, por desgracia,

a aquel que se queja ¡estopa!

y donde manda la banca

protegida por la tranca.

Los guardianes de las “democracias” europeas

Con los derechos robados

con políticas austeras

para que haya mamaderas

para los más avispados,

que ya siendo de la casta

no necesitan la pasta.

Que hambre el Pueblo esté pasando

mientras que con sus dineros

se rescata a los banqueros,

en tanto van recortando

los derechos adquiridos

cual si fueran forajidos.

Que estemos armas vendiendo,

causando golpes de Estado,

el racismo es apoyado

y en guerras interviniendo,

o es que creen somos idiotas

o estamos con las gaviotas.

O tal vez hayan pensado

que otorgándonos el premio

nos incitan con apremio

a que todo lo pasado

tornémoslo a hacer bien hecho

con justicia y por derecho.

Que no se piense que el premio es para ella, sino para

el pueblo europeo, para ver si despertamos y la echamos