POR UN MEJOR AÑO 2012

 

Que seamos capaces de ser solidarios, compartir, y luchar por un mundo mejor, de ciudadanos, y no de productores y consumidores.

SI TÚ QUIERES, PUEDES

 

Somos tan egoístas y tan simples que nos sobran 355 días al año, porque sólo nos comportamos como lo que deberíamos de ser, 10 de todas las jornadas anuales, que aún y así, han sido pervertidas por nuestro Gran Dictador, el Mercado.

Pero si tú quieres, puedes eliminar el hambre en el mundo, si quieres, puedes luchar contra la pobreza y la desigualdad, si quieres, puedes eliminar las fronteras que hemos levantado nosotros mismos, si quieres, puedes hacer que las religiones no nos separen...si tú quieres, puedes hacer que tus sueños se hagan realidad.

 

 

¡¡¡FELICES FIESTAS!!!

Un Nuevo Año está a punto de comenzar. Para los que están cerca o lejos, para los seres queridos, los viejos y los jóvenes, para los ricos y pobres, blancos y negros, amarillos y rojos, viene un nuevo año. Sin miedo, y con esperanzas, FELICES FIESTAS Y FELIZ AÑO NUEVO. 

Estamos en lucha, si tú quieres. Tú, ¿qué piensas hacer?

Durante unos días estaré de vacaciones, y como voy fuera, no creo que pueda hacer ninguna entrada nueva. Así que, hasta la vuelta, y que seáis muy felices.

LA PATRONAL SE SUBE A LA PARRA

Abaratar despidos, bajar salarios, mini-contratos

Como era de esperar, la Patronal no va a dejar pasar una oportunidad como ésta sin sacar tajada, y ya ha puesto sobre la mesa de Rajoy su programa de máximos, porque de ninguna manera, su intención es la de alcanzar algún tipo de acuerdo con los sindicatos, sino conseguir que el futuro Presidente de Gobierno convierta en ley sus propuestas regresivas.

Parece que la Patronal, después de la marcha de Díaz Ferrán, sigue dispuesta a mantener el circo, e incluso superar en disparates al anterior presidente. Las afirmaciones de Juan Rosell sobre la necesidad de despedir funcionarios, aparte de no entrar en su cometido y ser una necedad impropia en alguien cuyo trabajo consiste en crear puestos de trabajo y no destruirlos, son una impresentable y grosera maniobra para intentar desacreditar lo público, finiquitándolo y cediendo el paso a su privatización. Aparte de eso, sus declaraciones – que no se ha molestado en especificar – son gratuitas. El peso del sector público en España es inferior a la media Europea; mientras que en España supone un 45,9% del PIB, la media de los países de la zona euro es del 50,9%. Por otra parte, cuando se dice que sobran puestos de trabajo, se han de decir cuáles, y por qué, y si es posible proponer una solución, que desde un puesto como el suyo, es el de ofrecer puestos de trabajo para cubrir esas bajas.

Pero no va a ser así. El ala dura de la CEOE, representada por Arturo Fernández, amigo de infancia de Esperanza Aguirre y que ya se encargó de romper el intento de pacto de reforma laboral el pasado mes de Junio, ha conseguido que las propuestas del PP del decreto que Rajoy tiene preparado para después de Reyes, recoja gran parte de sus pretensiones: reducción drástica del número de tipos de contrato, la reducción de las indemnizaciones por despido, y una flexibilidad reforzada para los autónomos y las pymes que den empleo.

Reducir, recortar, reconversión, reformas,

regulación, renunciar, recochineo.

Y no queda aquí la cosa. Ya le han preparado la “hoja de ruta” al Presidente, defendiendo un contrato sin indemnización durante el primer año, y que no generaría antigüedad, y la aceptación de los mini-empleos – puestos de trabajo a tiempo parcial (pero sin límite de horas) por 400 euros al mes, sin retenciones ni cotización a la Seguridad Social – porque según esa lógica tan aplastante que acostumbran a utilizar “es preferible un contrato con sueldo bajo o de aprendizaje que estar en paro y sin cobrar nada”. También han hablado de congelar salarios para los próximos años, incluso de bajarlos, pero son solo avances, no hay nada concreto. Claro, que puestos a congelar o bajar, podían bajar los precios, pero eso por lo visto atenta a una economía libre, y las economías planificadas hace muchos años que murieron.

Los mini-trabajos, o minijobs, que ya fueron propuestos por el BCE en Agosto a cambio de comprar deuda española, y que fueron rechazados, por implicar una devaluación de los salarios, y porque ya existen en España los contratos parciales (con la diferencia que en estos hay retenciones y cotizaciones a la Seguridad Social), formarán parte, como ya he dicho, de la hoja de ruta de Rajoy. Loa que la defienden – la CEOE, el BCE, y los que usan empleos precarios, como hostelería, servicios de limpieza, transportes, etc. – arguyen que ayuda a la disminución del paro (¿?), pero en Alemania, donde han sido muy utilizados este tipo de contratos, han advertido que en el 80% de los casos, los que han accedido al mercado laboral con estos contratos no han conseguido uno mejor, que las mujeres – que son las que más los usan – quedan atrapadas de esta forma, impidiéndoles el acceso a la igualdad en el trabajo, y que lo único que se pretende en realidad es rebajar costes laborales y reducir derechos, no es ninguna solución contra el desempleo. Hay economistas que piden, incluso, su abolición.

Ya solo le falta a Rajoy poner como Ministro de Fomento a Arturo Fernández, y así se ahorrará muchas horas de trabajo inútil y de teatro cara a la galería, que de circos ya estamos hartos.

Ya ni el trabajo parcial les satisface, ahora los

minijobs. Si es que son como críos.

Tal cual era lo esperado,

la Patronal su tajada

les tiene ya preparada

antes de haber gobernado,

con viejas aspiraciones

y muy malas intenciones.

Es que si un circo antes eran

con los diarios disparates,

continúan los dislates

que a otras gentes desesperan,

tal que han hecho a funcionarios,

tachallos de innecesarios.

Se ha visto bien la jugada

pues que ha ido a desacreditar

por pasar a privatizar

e iniciar la chorizada

de lo que no siendo suyo

resulta ser un chanchullo.

A Rajoy le han preparado

para que se lo recoja,

lo que a ellos se les antoja

que debe sernos clavado,

para estar aún más puteados

y mantenernos bloqueados.

Pues no tienen intenciones

de hablar con los sindicatos,

pudiendo lograr sus tratos

mediante sus relaciones

con el Gobierno y afines

para conseguir sus fines.

Así en Enero veremos

un decreto ley firmado,

donde estará reflejado

que mucho reduciremos

el tipo de los contratos

para hacellos más baratos.

También las retribuciones

que se cobran por despido,

para abajo y de corrido

seguirán, con intenciones

de hacellas desaparecer,

pues no fueron de merecer.

Con los mini-empleos nos dicen

que son para algún apuro,

pero es meternos un puro

aceptar que no coticen,

y pretender que vivamos

del aire que respiramos.

Porque siendo mal pagados,

dicen que es mejor que nada

(y es verdad esta monada),

mas do han sido utilizados

ya también han advertido

que son trampa y no han servido.

Dicen que han parlamentado

de sueldos, y congelallos,

incluso hablan de bajallos,

mas no hay nada concretado.

Pues ojito al comentario,

que empresa sin empresario

funciona de mil amores,

mas no sin trabajadores.

Sacrificarnos unos, y forrarse otros. Ésta es la

definición de la crisis.

Otro más LAS COSAS CLARAS

Hablaba en la entrada anterior de la falta de políticos que den la talla. ¡Qué pena no tener políticos de la envergadura y capacidad de Julio Anguita! Sus análisis certeros y correctos son apenas cuestionables desde un punto de vista humanista. Solo desde la derecha más reaccionaria, o desde las políticas intervencionistas del mercado, se le pretende discutir, pero su discurso está basado en unos principios razonados y una argumentación sólida basada en la ética.

EUROPA VA EMBALADA…¿PERO A DÓNDE?

Bandazos a un lado y a otro cada día…

Podríamos muy bien comparar a Europa con un tren compuesto de varios vagones, unos de 1ª clase y otros de 2ª, e incluso alguno que se ha desenganchado. Pero lo más importante de este tren es que no lleva maquinista y los intentos de manejarlo desde las diferentes estaciones han fallado; va directo al descarrilamiento, aumentando cada vez más su velocidad sin que nadie sepa dónde ni cuándo, ni pueda impedirlo, y con los pasajeros ignorantes de lo que está ocurriendo.

Hay una sensación generalizada de que no hay políticos a la altura de las circunstancias, de que la crisis le viene grande a la actual generación política, y que ante ella solo son capaces de dar respuestas indecisas, con continuos bandazos y contradicciones, lo que ha permitido que Alemania y Francia asuman un poder que nadie les ha dado. Pero aún se ha llegado más lejos; se han sustituido gobiernos elegidos en las urnas por gestores de quiebras impuestos por el mercado, en contra de la opinión del Pueblo. En otras palabras: se han dado sendos golpes de estado en Grecia e Italia, y el resto de Europa ha callado. Y ha callado porque está atemorizada. ¡Qué bien funciona la doctrina del shock en ciertos momentos!

Pero los males de Europa no acaban aquí. Ya no es solo el tándem Merkozy quien parece estar al mando, sino que el mercado les ha añadido el “sexteto de Frankfurt,”* todos ellos neo-liberales y procedentes del mundo de las finanzas, y, cosa curiosa, ninguno de ellos ha sido elegido por los ciudadanos, pero serán los que determinarán las normas de obligado cumplimiento de los estados miembros, y que en caso de no ser cumplidas, serán castigados o multados. Todo lo cual se ha hecho a espaldas de los ciudadanos europeos, y con el respaldo de la prensa – que en manos de liberales y conservadores, en su gran mayoría – se han cuidado mucho en tapar lo que se estaba cociendo entre los bastidores del Europarlamento.

Componentes del “sexteto de Frankfurt”. Christine Lagarde

del FMI, Van Rompuy del Consejo Europeo, Durao Barroso

de la Comisión Europea, y Jean Claude Juncker del Eurogrupo

De esta manera tan burda se ha dado un giro de timón para que puedan obligar el Parlamento y el Consejo – supervisado por la Comisión – a seguir sus “sugerencias” sobre los presupuestos nacionales de cada país miembro. En plan estreno, y para empezar con buen pie han reimplantado, pero esta vez en serio el Tratado de Maastricht, según el cual ningún país podrá tener un déficit superior al 3%, ni su deuda nacional sobrepasar el 60% del PIB, y quien no cumpla será severamente castigado o multado. También podemos esperar de ellos jornadas de trabajo más largas, más años de trabajo, retribuciones salariales inferiores, menos derechos sociales, más facilidad de despido para el empresario, menos vacaciones, y en fin, menos de todo aquello, que nos pueda hacer la vida un poco más pasajera. Tal y como era de esperar, a nuestro futuro presidente le ha faltado el tiempo para ir a ponerse a sus órdenes, y pedir el visto bueno de las reformas que nos tiene preparadas para Enero del próximo año.

Pero, ¿Podemos decir que Europa está bien dirigida, que hay un liderazgo con las ideas claras? Si se fue incapaz de rescatar a Grecia en su momento, cuyo PIB era tan solo el 3% de la zona euro, y se hubiese podido solucionar con un pequeño esfuerzo económico, si a Portugal y a Italia les han impuesto unas reformas que las hunden en la mayor de las miserias, cuando los mismos bancos franceses están siendo atacados, y Alemania tiene problemas para colocar en el mercado bonos de deuda, y a pesar de todo se permite que los mercados, ya completamente desbocados, campen a sus anchas sin imponerles ningún tipo de impedimento, tal y como en el G-20 prometió Sarkozy, de imponer la tasa a las transacciones financieras (Tasa Tobin), de luchar contra el fraude fiscal y los paraísos fiscales dentro de las fronteras de la Comunidad, y de subir los impuestos a los ricos.

Si se continúa con las medidas de austeridad, Alemania no tardará mucho en ver caer su mercado por falta de exportación, y ante la globalización de la economía, la recesión en que entrará Europa arrastrará a América, y posteriormente a China y Asia, convirtiéndose en internacional. Los mercados han decidido tomar el poder, ¿hasta dónde estamos dispuestos a seguir aguantando? No olvidemos que en situaciones similares creció el nazismo y la extrema derecha hace menos de un siglo. Tenemos soluciones, y debemos de plantearlas y exigirlas: volver a los planteamientos keynesianos, mediante la inyección de dinero público para estimular el crecimiento económico. No es ninguna invención, lo dicen los premios Nobel de economía, Paul Krugman y Joseph Stiglitz, economistas de la talla del profesor Navarro, Juan Torres, y otros muchos. No podemos seguir con los recortes para llegar a las privatizaciones, que es lo que desea el mercado: hacerse con el mando y el patrimonio de los estados (nuestro patrimonio, y nuestro bienestar).

No se le puede dejar el tren al mercado porque no sabe dónde va, el mercado solo sabe el objetivo concreto que tiene: ganar dinero de la forma que sea.

¿Hasta dónde vamos a aguantar?

En un tren que va embalado

y por nadie manejado

vamos a un futuro incierto

do nos espera el mercado

para acabar de arruinarnos

y en la miseria dejarnos.

Pues que hemos sido vendidos

por políticos perdidos

que en quitarnos no han dudado

los gobiernos elegidos

para poner impostores,

del mercado, sus gestores.

Si la troika fue un desastre,

ahora un sexteto pillastre

callando nos han metido

para ponernos más lastre,

terminando por ahogarnos

para poder rescatarnos.

Que es lo que están esperando,

con liberales al mando

terminar de empobrecernos,

y así iremos aceptando

las condiciones que apliquen,

pues no habrá quienes repliquen.

Más horas trabajaremos,

menos jornal ganaremos,

habrá menos vacaciones,

más años cotizaremos,

y sin derechos sociales

pues no existirán, ya tales.

Todos estos pormenores

por votar conservadores,

son justa causa del miedo

que hay a ser renovadores,

y no votar al que ofrece

que pague el que pertenece.

Ahora, sin haber votado,

gobiernos les han dictado

a dos de nuestros países,

y nadie les ha apoyado,

 a pesar de sus protestas

tan claras y manifiestas.

Si hacer esto les dejamos

y nuestras voces no alzamos,

mañana seremos otros

a los que nos pongan amos,

por lo que habrá que frenallos

antes que se pongan gallos.

Si no en recesión caeremos

y putas las pasaremos,

que estando globalizados

al mundo la extenderemos,

dando paso a dictaduras

o hacer nuestras luchas duras.

No habrá forma ni manera

en que habiendo masa obrera

se hagan privatizaciones;

todos seremos barrera

que evite sigan robando

y el futuro destrozando.

Nos ponen sus gestores para mantenernos

en la miseria que ellos desean que estemos

para ser más manejables 

 *Sexteto de Frankfurt: ver “Público” 06/12/11 (En manos de quién estamos)
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