He querido escoger estos dos vídeos para finalizar este mes, porque en realidad, vienen a representar lo que está pasando, y en una forma más cercana, ha pasado durante el mes que termina.
Aunque este primer vídeo se hizo para celebrar el 130 aniversario del Banc de Sabadell, prefiero destacar la otra Europa que todos exigimos, la del Canto de la Alegría de la 9ª Sinfonía de Beethoven, la de una Europa no alemana sino con una Alemania europea, no la Europa de los bancos y los mercados, sino la de las personas, esa que toca el Himno de la Europa que no existe, pero que deseamos, y la que escucha; desde los ancianos y ancianas, hasta los niños y niñas que corretean y juegan alegremente al son de la música y siguiendo sus acordes, y que representan el futuro, un futuro en estos momentos harto incierto. No queremos más corralitos, ni castigos por no cumplir con el déficit, queremos hermandad, unidad, y libertad. Para eso nos hemos querido unir.
Froh, wie seine Sonnen fliegen Gozosos como vuelan sus soles
Durch des Himmels prächt'gen Plan, a través del formidable espacio celeste,
Laufet, Brüder, eure Bahn, recorred así, hermanos, vuestro camino
Freudig, wie ein Held zum Siegen. gozosos como el héroe hacia la victoria
Durch des Himmels prächt'gen Plan, a través del formidable espacio celeste,
Laufet, Brüder, eure Bahn, recorred así, hermanos, vuestro camino
Freudig, wie ein Held zum Siegen. gozosos como el héroe hacia la victoria
La injusticia es parte del ser humano, y en estos momentos parece haberse desatado una locura con nombre y apellidos a la que no se le pone freno: el mercado y su exceso de ambición.
Si siempre fue necesaria la lucha y hacer que se escuchase nuestra voz, ahora lo es más que nunca; debemos de levantar la voz, porque nos están ahogando, y no nos pueden quitar también el derecho a respirar. Nos toman el pelo y no podemos aceptarlo con la resignación de los corderos ni con el silencio. Las leyes están para servir al pueblo, no para oprimirlo, y si no se hace así, es nuestra obligación y estamos legitimados para luchar con toda nuestra fuerza.
No podemos permitir ser humillados por una diputada que grita "que se jodan", y luego nos repriman y castiguen por salir a la calle a exigir ser respetados. Somos el pueblo soberano y somos quiénes tenemos el derecho de exigir a un gobierno, que si no vale, que se marche.
Se acabaron ya las mentiras; queremos que se solucionen nuestros problemas, no que creen nuevos e innecesarios con su actitud prepotente. Cuando alguien se ve incapaz de realizar su trabajo, se va. No tenemos por qué pagar nosotros un trabajo mal hecho, y mucho menos que nos roben.
¡Haz que te escuchen!